Back to basics

Desde que comenzó la crisis actual se menciona mucho lo que se conoce como “back to basics” o vuelta a lo básico. Son muchos los inversores que opinan que los productos financieros deben ser fácilmente entendibles y explicables. Que aquellos que son altamente complejos, a la larga, pueden ocasionar problemas.

Uno de los mejores ejemplos de simplicidad son los fondos de inversión. Desde su creación en España a mediados de los años sesenta, este producto financiero, en lo esencial, apenas ha cambiado, y sin embrago, no por ello ha dejado de aprovechar las oportunidades que han surgido en múltiples mercados y activos financieros.