En tiempos de crisis, una de las principales claves para tomar decisiones de inversión acertadas es la transparencia. La pandemia por coronavirus ha tenido gran repercusión en los mercados financieros y, en este contexto de incertidumbre y la volatilidad, el inversor debe ser capaz de mantener la calma y no dejarse llevar por el pánico en los mercados. Ninguna situación es definitiva y, por ello, es fundamental analizar todas las decisiones para dar el paso más acertado en cada momento, con miras a seguir invirtiendo a largo plazo.
Es habitual, no obstante, meditar las decisiones a conciencia en épocas de crisis, pues el inversor se sentirá más cómodo y seguro si cuenta con información básica y clara sobre el producto que está pensando contratar, sin dejar cabos sueltos a la hora de cerrar una inversión. Desde hace unos años, como parte de la normativa UCITS IV, las entidades del sector cumplen con una labor fundamental para apoyar a los inversores en este proceso mediante la elaboración del documento de datos fundamentales (KID, por sus siglas en inglés, Key Investor Document). A través de este folleto, el inversor puede conocer las características esenciales del vehículo de inversión que está pensando contratar, desde la rentabilidad que el producto ha ofrecido históricamente hasta los niveles de riesgo a los que estaría expuesta nuestra inversión, pasando por el plazo indicativo de la inversión, así como los costes y comisiones asociados al vehículo de inversión.
Arantxa López Chicote, experta del Observatorio Inverco.